Carta a Gianantonio, 28 agosto 2018

Querido hermano,
esta mañana has celebrado tu Pascua y el Señor te ha acogido en sus brazos como hijo muy querido. Hemos rezado mucho por ti, y nuestra plegaria no ha sido en vano. Estás en el mejor sitio de los bienaventurados, tú, que durante 57 días te quitaron la libertad en el secuestro en Camerún, tú, que no has perdido la esperanza en este año de enfermedad, nos has dado a todos muestras de paz y de confianza. “Con infinita confianza…” Tú, que has hecho vida la Oración de Abandono, como hizo Carlos de FOUCAULD. Tú, hermano querido por todas las personas a quienes has servido, tratado, trabajado… tengo que darte las gracias por el testimonio tan valioso de tu vida, donde no te has rendido ni has dejado a otros la misión que el Señor te confió.

Me duele mucho tu adiós, pero sé que es temporal. Nos encontraremos en la fraternidad de los hijos de Dios y recordaremos la campaña de oración en cadena en todo el mundo por tu libertad estando secuestrado con Gilberte, a quien tuve la gran alegría de visitar en Montreal, y me enseñó los objetos que tenía durante el secuestro, y Giampaolo, tu compañero misionero en Camerún. Recuerdo con alegría la noticia de vuestra liberación. Sonaron las campanas de muchas iglesias en España, en Italia, en tantos lugares, en aquella Pascua de 2014. Tu secuestro nos movió a contemplar la falta de libertad en la humanidad, en los pueblos oprimidos, en los pobres más pobres, la bota del poderoso que aplasta al humilde, la manipulación de las vidas de seres humanos por intereses comerciales y del poder que no da la cara, sólo a través de sus portadores del hacha de guerra… Pero el ser humano y sus derechos, como tantas veces repite el papa Francisco, está por encima de toda ideología.

Tu fraternidad italiana, tu familia, tu diócesis de Vicenza, tus amigos en Camerún, te van a echar de menos, y todos los hermanos de la fraternidad sacerdotal te tendremos como un referente de misionero comprometido, valiente, hombre de Dios que deja huella para animarnos a seguir trabajando por el Reino y su justicia. Giampaolo, tu compañero de misión en Camerún, seguirá sembrando la semilla de ese Reino que crece desde lo pequeño e insignificante en nuestro mundo.

Tuve la gran alegría de conocerte personalmente en Castelfranco, Italia, en 2015, y en Rudy, Polonia, el verano pasado, compartiendo contigo la asamblea europea de la fraternidad. Algo me decía que debías cuidar tu salud, y así te lo expresé. A través de estos últimos meses nos hemos comunicado y he seguido tu proceso con preocupación. Hoy doy gracias al Señor por tu vida, por cómo has ido superando las pruebas con esa calidad humana tuya que me enseña a valorar lo negativo de la vida, sabiendo que si el grano de trigo no muere, no da fruto. Como el hermano Carlos, lo has dado todo por los más desfavorecidos, y eso me llena de alegría, a pesar del dolor de la separación. De todo aquello que consideramos doloroso, estoy seguro que surge algo nuevo, inesperado, positivo y bueno para nosotros y para los demás. Gracias por enseñarme a tener paciencia y paz.

Pide por nosotros ante Dios, que hoy te colma de gracia y de amor.

Te recordaremos siempre.

Aurelio SANZ BAEZA, fraternidad sacerdotal Iesus Caritas,
hermano responsable

Perín, Cartagena, Murcia, España, 28 de agosto 2018, martirio de San Juan Bautista

Nota biográfica:

Gianantonio ALLEGRI, miembro de la fraternidad sacerdotal Iesus Caritas. Nace en 1957 en Pievebelcino (Vicenza, Italia) Sacerdote en 1982. Vicario en algunas parroquias del Vicentino. Desde 1991 a 2001 trabajó como fidei donum, misionero en Camerún. Regresó para el ministerio de párroco en Magré di Schio hasta 2013. Vuelve a Camerún y es secuestrado por Boko Haram durante 57 días, con sus compañeros, la hermana Gilberte BOUSSIÈRE, de Quebec, y Giampaolo MARTA de su misma diócesis de Vicenza. Tras su liberación regresa a la diócesis y fue párroco de Santa Maria Bertilla en Vicenza.

En la mañana de hoy llegó a los brazos del Padre después de luchar contra el cáncer durante un año.

PDF: Carta a Gianantonio, 28 agosto 2018, esp

Carta de Pascua de Jean-François y Aurelio, Perín, 23 marzo 2018

Queridos hermanos,
os escribimos desde Perín, España, donde nos hemos reunido para preparar la Asamblea Mundial de la fraternidad sacerdotal Iesus Caritas en Cebu, Filipinas.

Estamos cerca de la Pascua, aún con frío, pero en primavera.

Hemos realizado la Carta de Convocatoria para esta asamblea, y junto a los 56 delegados o responsables que participarán, todos los hermanos de Iesus Caritas están implicados. Teniendo en cuenta la coyuntura de la vida del mundo y de la Iglesia, que subraya la actualidad de la espiritualidad de Carlos de FOUCAULD, por una parte la evolución del mundo: los cinco continentes son cada vez más interdependientes, el gran movimiento migratorio, la degradación del planeta se acentúa, mayores diferencias entre ricos y pobres, los conflictos locales con repercusión internacional (Siria, Yemen…), el dios dinero con tanto poder… Vemos a muchos países replegarse sobre sí mismos, con el proteccionismo y al mismo tiempo la desconfianza de unos y otros.

La evolución de la vida de la Iglesia: el papa Francisco, mirando esta situación mundial, nos presenta los desafíos en la misión de la Iglesia. En la exhortación apostólica Evangelii Gaudium llama a toda la Iglesia a retomar una dinámica de evangelización, centrados en Cristo, y saliendo al encuentro del hombre, particularmente a los más pobres, a las periferias. En Laudato si, nuevamente, nos pide movilizarnos en torno a la figura de Francisco de Asís para practicar una feliz sobriedad y una solidaridad con los más frágiles de nuestro mundo. Sentimos en nuestras comunidades y diócesis la resistencia a este movimiento de conversión a la que nos llama el papa Francisco. Nosotros, sacerdotes en fraternidad, discípulos del hermano Carlos, debemos comprometernos en esta situación motivados por las intuiciones de Carlos de FOUCAULD: gritar el evangelio con la vida, ser presencia del evangelio en el corazón del mundo que no conoce a Cristo; las llamadas a ser hermanos universales y hacer posible en nuestras comunidades una dinámica de salida y de diálogo; llamada a vivir la espiritualidad de Nazaret, es decir, la pobreza, la oración y la cercanía con los pobres. Por tanto, no ser una Iglesia narcisista que se mira sólo a sí misma.

En nuestra asamblea de Cebu, Filipinas, tendremos presente esta triple fidelidad: a Cristo, al hermano Carlos, al papa Francisco. Por eso es tan importante que cada hermano ponga de su parte en esta asamblea, por la oración asidua pidiendo la intercesión de Carlos de FOUCAULD, la comunión fraterna entre nosotros, por la comunicación de unas fraternidades y otras de todos los países… Para eso tenemos un medio de comunicación que es la página iesuscaritas.org Os invitamos a enviar vuestros artículos, reflexiones, noticias…

Gracias por todos los esfuerzos para preparar bien nuestra asamblea mundial, con el trabajo del Cuestionario de Filipinas, y por colaborar económicamente para ayudar en los viajes de hermanos que no pueden hacer frente a este gasto.

En estos días de trabajo hemos participado de la vida de muchas personas, de situaciones humanas agradables y otras más complicadas; hemos vivido la oración y la eucaristía pidiendo por todos vosotros y especialmente por Gianantonio, de Italia, operado de su cáncer en estos días.

Que la alegría de la Pascua nos salga de un convencimiento pleno de que Jesús está vivo en las personas, situaciones que nos rodean, en los movimientos del mundo a favor de los derechos del hombre y de la mujer, de tantos corazones buenos que encontramos cada día.

Un abrazo grande y fraternal.

Jean-François y Aurelio

Perín, Murcia, España, 23 de marzo 2018

PDF: Carta de Pascua de Jean-François y Aurelio, Perín, España, 23 marzo 2018, es

Carta de Aurelio a los hermanos americanos, 2 marzo 2018

Queridos hermanos,

ha sido un gran gozo participar en la II Asamblea Panamericana de la fraternidad en Santo Domingo y compartir la vida y preocupaciones, las esperanzas y realidades de los hermanos presentes y de los ausentes. Junto con Mark, como equipo internacional, he sentido la universalidad de la vida de la fraternidad y el espíritu de Carlos de FOUCAULD tanto en los trayectos de vidas como en las respuestas a los desafíos de nuestro tiempo.

Gracias por todo lo que se ha trabajado, antes y durante la asamblea. Valoro el esfuerzo de todos: los responsables de cada país preparando las respuestas a los cuestionarios, el trabajo de Fernando con la coordinación, los hermanos dominicanos con la preparación de la asamblea y hacer que estuviéramos como en casa… Nuestro hermano Francisco, arzobispo de Santo Domingo, con su hospitalidad y cercanía… Nuestro hermano obispo Rafael, con su testimonio de fidelidad a la fraternidad y al pueblo… Son muchos los motivos para estar agradecidos.

Desde cada persona, los hermanos, la comunidad de hermanas carmelitas y los trabajadores de la casa donde estábamos, el trabajo de Raisa, la gente que conocimos en las parroquias y comunidades, se recibe un don. Es el ser humano que nos da lo mejor de sí mismo. Cuando vamos por la vida de peregrinos, cuando salimos de nuestro “yo” para encontrarnos con el “otro”, y nuestra actitud no es estar a la defensiva, sino de recibir y ser acogidos, sin juzgar, sin prejuicios, se hace posible la fraternidad, y se crea ese momento contemplativo de entre las personas, que es más profundo aún cuando hace tiempo que no nos hemos visto. Por eso, la gran alegría de encontrar de nuevo a hermanos y fundirse en el abrazo fraterno.

Gracias a Carlos Roberto y Eleuterio por sus dos ponencias tan interesantes e interpeladoras. Nos han ayudado a tener una opinión más justa, a profundizar en las llamadas desde la Biblia y la Laudato si del papa Francisco hacia la realidad del mundo de la migración y de la ecología, en el cuidado de la casa común. Esto ha supuesto una toma de conciencia sobre los desafíos que se presentan no sólo en América sino en todo el mundo. Nuestro hermano Carlos tuvo esa conciencia desde su viaje a Marruecos, como científico, y aprendió de la gente sencilla cómo valorar lo que se tiene, cómo valorar al extranjero; por qué su fe, su cultura, su color o pensamiento nos interroga, ya que es distinto a nosotros. El mensaje de fraternidad universal de Carlos de FOUCAULD queda una vez más en el presente, en nuestros “presupuestos” pastorales y personales.

Los tiempos de oración, en la adoración, en la celebración de la eucaristía, creo que nos han ayudado no sólo a pensar, sino a trabajar en equipo y hacer entre todos un buen trabajo que ayude a todos los hermanos de América.

Echamos de menos a los hermanos de México, pero valoramos sus aportaciones en el cuestionario. Nos sentimos cerca de Douglas, en Venezuela, que está intentando dar a conocer la fraternidad en su país, contactando con sacerdotes motivados por Nazaret y el estilo misionero del hermano Carlos.¡Bravo, Douglas! Y mucho ánimo a la fraternidad de Argentina en la preparación del Mes de Nazaret en el próximo julio.

Hoy escribo con el dolor y la preocupación por los ataques terroristas en Burkina Faso. Todo el día estoy pendiente de noticias. Me duele mucho que se ataque a cualquier persona, y más aún a un país que amo tanto. Pido oraciones.

Y le pido a Dios y a su Madre que nos bendigan, que ilumine con su Espíritu nuestras vidas, nuestras comunidades, nuestras familias. Que sepamos mirar a Jesús en la adoración con confianza plena de amigo, que escuchemos al Señor en el desierto, con sus largos silencios y esperas -los de Él, a la búsqueda de nosotros-, que pongamos nuestro corazón en la revisión de vida, como un libro abierto, real, no de ciencia ficción o de historia, que sean los más abandonados quienes nos motiven en el camino del Evangelio.

Un gran abrazo transoceánico.

Aurelio SANZ BAEZA, hermano responsable

Perín, Cartagena, España, 2 de marzo 2018

PDF: Carta de Aurelio a los hermanos americanos, 2 marzo 2018, esp

Carta de Santo Domingo, febrero 2018

II ASAMBLEA PANAMERICANA – 19 AL 24 DE FEBRERO 2018

Queridos hermanos,

reciban un cordial saludo en Cristo Jesús, y que el proceso cuaresmal que vivimos nos lleve por el camino de la conversión.

En un clima de oración, alegría y fraternidad compartidas, nos hemos reunido los responsables nacionales y delegados de Argentina, Chile, Brasil, Haití, República Dominicana, Estados Unidos y Québec-Acadie, junto a dos miembros del equipo internacional, Aurelio y Mark. Queremos destacar también la presencia del Obispo Emérito Mons. Rafael Felipe Núñez durante toda nuestra asamblea. Agradecemos a Dios y a todos los que colaboraron con su oración, su trabajo y su contribución económica para que este encuentro fuera posible, especialmente a nuestros hermanos de la República Dominicana. También a los sacerdotes y diáconos que nos reemplazaron en nuestras parroquias.

Nuestro día se iniciaba con la Adoración Eucarística y terminaba con la Eucaristía. Revisamos el caminar de nuestras fraternidades en los últimos dos años y comprobamos que muchas de las propuestas elaboradas en la anterior asamblea, fueron puestas en práctica. Quisiéramos destacar la celebración del centenario del nacimiento del hermano Carlos realizada en todos nuestros países a través de simposios, eucaristías, retiros, publicaciones, posters, etc. Esto nos permitió dar a conocer su figura y su espiritualidad a muchos hermanos sacerdotes, diáconos, laicos, religiosas y seminaristas.

Durante nuestra asamblea dos hechos relevantes que se dan en nuestros países centraron nuestra atención: Las migraciones y el maltrato a nuestra Madre Tierra. Son verdaderos signos de los tiempos que quisimos examinar a la luz de la Palabra de Dios, del magisterio social de la Iglesia, especialmente del Papa Francisco, y de la espiritualidad que hemos recibido del hermano Carlos de Foucauld. El objetivo de este discernimiento comunitario fue descubrir la voluntad de Dios y comprometernos más en una verdadera Pastoral de Migrantes y en el cuidado de nuestra Casa Común.

Al escuchar atentamente los informes de cada país comprobamos que de una u otra manera estamos comprometidos en estos dos campos, pero que necesitamos hacer mucho mas porque está en juego la vida de personas, familias y pueblos vulnerables. Son victimas del capitalismo salvaje que las destruye sin piedad con el fin de rendir culto al dios dinero.

Nos iluminaron las dos ponencias presentadas por nuestros hermanos Eleuterio Ruiz de Argentina “Extranjeros y refugiados. Reflexiones sobre un desafío de nuestro tiempo a la luz de la Escritura” y Carlos Roberto Dos Santos de Brasil “Iluminación bíblica y magisterial del Papa Francisco sobre la cuestión del medio ambiente”. Ambas estarán en la Pagina Web de nuestra fraternidad internacional.

Ha quedado claro para nosotros que el Señor nos pide “ir en busca de los más abandonados”, como hizo el hermano Carlos en su tiempo, que en este caso son los migrantes que llegan a nuestros países en situación de gran vulnerabilidad. La Palabra de Dios es taxativa: “como un nativo dentro de ustedes será para ustedes el extranjero que reside con ustedes; lo amarás como a ti mismo. Porque extranjeros fueron ustedes en Egipto. Yo soy el Señor su Dios” (Lev 19,34). Y el Papa Francisco nos muestra un camino muy concreto para expresar este amor: Acoger, proteger, promover e integrar a nuestros hermanos y hermanas migrantes.

También hemos sentido un fuerte llamado a cuidar la Casa Común y hacer nuestra la pregunta que hace el Papa a la humanidad en su Encíclica “Laudato Si”: “¿Qué tipo de mundo queremos dejar a quienes nos van a suceder, a los niños que están creciendo?” (N.160).

Queremos reflexionar más sobre este tema en nuestras fraternidades y con nuestros presbiterios y tener una actitud profética. También trabajar en red con organismos de Iglesia y de la sociedad civil para proteger el medio ambiente, y preservar la belleza y la integridad de la creación, don de Dios a toda la humanidad. El estilo de vida no consumista del hermano Carlos nos impulsa a vivir en la sencillez, en la austeridad y en la armonía con la naturaleza.

La convocación del Sínodo de los Obispos para la región Pan-amazónica, nos llena de alegría y esperanza. Colaboraremos activamente en su preparación y posterior puesta en práctica.

Hacia la mitad de nuestra asamblea, hemos visitado las comunidades de una parroquia de la periferia pobre de Santo Domingo. Esta visita nos puso en contacto con el santo pueblo de Dios, que, desde su pobreza, nos muestra la urgencia de ser coherentes con los caminos de compromiso que Dios nos ha mostrado en esta asamblea y los cuales fueron retomados en nuestro día de desierto y en la Revisión de Vida que hicimos en pequeños grupos.

Pedimos al Espíritu Santo que nos haga cada día mas fieles al carisma de hermano Carlos, que lo podamos compartir con muchos miembros del pueblo de Dios y así seguir contribuyendo al surgimiento de una “Iglesia pobre y para los pobres”

Nuestro próximo encuentro será en Buenos Aires, Argentina del 20 al 24 de septiembre de 2021.

Sus hermanos de la II Asamblea Panamericana

Santo Domingo, República Dominicana, 24 de febrero 2018

PDF: Carta de Santo Domingo, febrero 2018, esp